Resultados
De acuerdo a los objetivos y actividades mencionadas, se logró capacitar a 100 productores con las herramientas teóricas para la elaboración de productos con valor agregado, como son los de IV gama, con estándares de Buenas Prácticas de Producción, y estrategias de comercialización.
Asimismo, más de 70 productores se vieron beneficiados con visitas prediales y análisis de laboratorio, que certifican la calidad microbiológica de sus hortalizas frescas.
En una segunda etapa práctica del proyecto, fueron capacitados 30 productores con actividades en una sala de producción a nivel piloto. Estas actividades incluyeron análisis de Vida útil microbiológica, en los que se observó que los productos elaborados tienen una duración de hasta 9 días de almacenamiento refrigerado, de acuerdo a lo indicado en el Reglamento Sanitario de los Alimentos. También, análisis de Vida útil sensorial, con lo que se determinó que el día 9 las hortalizas elaboradas mantenían sus características organolépticas aceptables. Además, mediante análisis químicos, se generaron tablas nutricionales para un futuro etiquetado nutricional del envase, el que será acompañado de un Logo-Marca diseñado para ser distinguidos.
En relación a la Estrategia de Comercialización, se realizaron dos experiencias de Mercado Simulado. La primera en las dependencias de la Universidad de Santiago de Chile, y luego en la feria libre Santa María Celeste de Ñuñoa.
Finalmente, se realizó asesoría y acompañamiento para la conformación de una Asociación Gremial de pequeños productores de hortalizas de la Región Metropolitana. Y la firma de un acuerdo con la Universidad de Santiago de Chile para el traspaso de equipos cedibles, como un aporte para el comienzo de su emprendimiento.